lunes, 26 de diciembre de 2011

Rastros de violencia - Pies De Plomo

Paul se quedó con una mitad del cuerpo dentro del bar y la otra fuera sin saber qué hacer. Miró a Jim y Clark y vio como intentaban sacar sus pistolas, pero ellos eran más rápidos.

Paul pudo ver como infinidad de balas salían de las metralletas Thompson M1. Veía todo como a cámara lenta. Sentía el dolor de sus amigos cuando las balas atravesaban sus cuerpos. Intentaba mirar las caras de las personas que estaban disparando, pero el agua de la lluvia lo hacía imposible.

Dentro del bar estaban todos los demás sin moverse ya que sabían que al intentar ayudar solo causarían más muertes. Una de las balas rozó sin penetrar el brazo de Paul que pareció no notarlo al principio.

Cuando las tres personas misteriosas se quedaron sin balas en sus metralletas, rápidamente subieron en el BMW 502 color granate que esperaba tras ellos.

Cuando Paul se aseguró de que no volverían para acabar con él, se acercó  a sus amigos para tomarlos el pulso, pero ya estaban muertos. Paul entró en el bar y dijo que avisaran a una ambulancia ya que él no podía quedarse a esperar pues sabía que su vida corría peligro.

Paul tenía un pequeño piso de unos 70 metros cuadrados a unas diez manzanas del bar. Cautelosamente se fue a él, nadie sabía de la existencia de ese piso, y solo lo utilizaba para casos extremos como este.

No dejaba de pensar cómo sabían que estaban en ese lugar, ni por qué querían matarlos, solo pensaba que todo se debía a la carta que recibió. También tenía que avisar a Frank, o a lo mejor ya lo sabía; era el único que esa noche no se acercó con ellos al bar.

Subió a su piso y lo primero que hizo fue entrar en el baño para darse una larga ducha de agua caliente antes de curar la herida de su hombro.

Salió con una toalla rodeada en la cintura, se sentó en su sofá y puso un vinilo de Aretha Franklin. No le gustaba mucho, pero su voz y su música le ayudaban a relajarse.

La cabeza que le daba vueltas, lo único que necesitaba era descansar, mañana ya habría tiempo para entrar en acción y tomar decisiones. Sabía perfectamente que no se podía quedar mucho tiempo en ese piso, que lo estaban buscando y hasta que no lo mataran no dejarían de perseguirle.

Se levantó del sofá y se dirigió a su habitación con las luces apagadas. Se dejó caer en la cama como si su cuerpo hubiese sido tiroteado y se quedó dormido.

Paul tenía 40 años, llevaba trabajando 3 años en esa oficina, pero antes de empezar ese trabajo y cometer atracos, Paul tenía un pasado a las espaldas…

Era verano, Paul tenía 20, era joven y demasiado confiado y podríamos decir que un poco inocente.

Su padre se llamaba Bob, aunque sus amigos le conocían como Bobby.

Paul dejó los estudios con 18 años, sabía que así no aprendería todo lo que pasa en la calle. Su padre no se opuso a ello, además quería que fuese un chico espabilado.

Para qué negarlo, su padre era un gánster. En esa época o eras un gánster o un pobre ciudadano que trabajaba casi doce horas al día y dabas más de la mitad de tu dinero a la familia de la ciudad si no querías aparecer muerto al amanecer en tu cama, y para colmo la policía no haría nada para buscar a los culpables.

Bob era la mano derecha de Mouse Senior que a su vez era el padre de Mouse Junior. Mouse Senior encargaba “trabajos” al padre de Paul y este se encargaba de realizarlos junto con un pequeño grupo de la familia.

Bob metió a Paul en la familia: realizaba pequeños trabajos que ni siquiera rozaban la ilegalidad y el crimen. Paul conducía un coche y se encargaba de llevar a la mujer de Mouse Senior de compras, al teatro o a tomar el té con sus amigas.

La mujer de Mouse Senior era más joven que él, ella tenía 33 años, pero poseía un cuerpo escultural. Tenía el pelo negro unos ojos verdes increíbles, era muy cariñosa y sobre todo con los chicos jóvenes como Paul.

Mouse Senior confiaba en Paul y siempre le decía que sería un hombre muy importante dentro de la familia.

Las ciudades de Estados Unidos estaban controladas por familias. En cada parte de Estados Unidos había una familia que controlaba los impuestos de cada zona y también se aseguraba de que no hubiese muchos conflictos.

Tres meses después de que Paul empezara a trabajar, el capo de la familia más influyente que gobernaba en los Estados Unidos murió, y eso significaba que un nuevo capo llegaría al país.



Aquí os dejo el link para que descarguéis el pdf (tiene mas cosas a parte del capitulo 5)
http://www.mediafire.com/?mesfd602pc0yydd

jueves, 22 de diciembre de 2011

Así es la banda tributo a Queen

Roger Taylor y Brian May, bateria y guitarrista de Queen, serán los directores musicales del espectáculo.Pero a priori, no tocarán sus instrumentos sobre las tablas, por mucho que se sepan al dedillo el repertorio.Hablamos de The Queen Stravaganza, la banda tributo de Queen que recorrerá Estados Unidos en 2012.Lo curioso de este homenaje es que el propio Taylor ha sido el encargado de elegir a los miembros del grupo, con un concurso emitido en Internet que concluyó el pasado 8 de Diciembre.
Las audiciones tuvieron lugar en el estudio de Foo Fighters, en Los Angeles.
Os dejo unos vídeos de algunos elegidos:

Mas de 5 millones de visitas en YouTube el vídeo del cásting de Marc Martel, el cantante masculino que integrará la banda tributo. ¿El motivo de tanta curiosidad? Su sorprendente parecido vocal a Freddie Mercury.

Dejo también el video de los dos guitarristas. Este es Brian Gresh ( ojo al minuto 1:06 y al minuto 1:36)
Y el segundo virtuoso de las cuerdas es el canadiense Tristan Avakian, que aquí toca Killer Queen


Puedes ver vídeos de todos los concursantes y del resto de los ganadores en la página web de The Queen Extravaganza

domingo, 18 de diciembre de 2011

¡Mariconchi, Mariconchi!

Os dejo un temón para que os riáis un ratillo. ¡Cuidado, que la canción es muy pegadiza!. Los intérpretes no se quién son, supongo que prefieren seguir ocultos tras el anonimato.

De paso, en el vídeo podéis echaros unas risas con Jean Claude Van Damme en bucle demostrando su destreza para el baile.


"¡Mari, Mari, Mari, Mari, Maricooooonchi, Maricooooonchi, Maricón, Maricón, Maricooooonchi!"

Están siempre al límite con frases como: "Con su ternura me la pone duuuuuuudaría..."

Hala, que lo disfrutéis.

jueves, 8 de diciembre de 2011

El gran reto musical

¡Estrenamos sección! Un juego para nuestro público.

Esta sección es para que os entretengáis un poco. Consiste en adivinar canciones a partir de un pequeño fragmento de las mismas: un solo, un riff...

Creo que puede tener una buena acogida por vuestra parte. Espero que os guste la idea.

Podéis acceder a ella haciendo click en la imagen de la barra lateral.

El gran reto musical

sábado, 3 de diciembre de 2011

Rastros de violencia - Sombras bajo la lluvia

Los dos días siguientes pasaron sin muchos inconvenientes. Esa misma semana les llamó por teléfono Chango para el siguiente trabajo.

Paul y los demás quedaron en el bar que solían frecuentar antes de cada trabajo para relajarse un poco antes del nuevo encargo.

Allí estaban sentados en una mesa Paul, Jim y Clark. Estaban tomándose una cerveza cada uno, Paul tomaba una Guinness que era la que le gustaba y Jim y Clark se estaban fumando un porro a medias.

A Paul no le gustaba mucho quedar en ese bar antes de cada trabajo ya que había bastantes personas que los conocían y solían hablar un poco del plan que utilizarían, pero Jim siempre decía que eran amigos todos los del bar y si se enterasen de lo que hacían tampoco dirían nada, ya que ellos tampoco podían presumir de ser buenas personas.

Por allí estaban Tony, que solía vender algo más que maría, Danny 6 dedos, que daba palizas por dinero, y Mouse Junior, quien su padre era uno de los capos más conocidos y temidos de Nueva York.

Esos eran algunos de los amigos más cercanos a ellos, la verdad es que no se podían quejar de ellos ya que cuando los necesitaban estaban allí.

— Bueno… — dijo Paul. — Mañana Clark nos recoge en mi casa con la furgoneta a las 9, a las 9:30 aparcamos en la entrada de la izquierda del banco, esperamos hasta las 9:45 que venga el furgón blindado y lo asaltamos ¿no?

— Sí — dijo Jim muy serio.

Paul disimulaba muy bien, pero estaba muy nervioso. No podía dejar de pensar en la nota que recibió el otro día y no sabía lo que pasaría si se enteraba de lo que harían mañana.

Intentó pensar en otra cosa y miró por la ventana. Estaba lloviendo de una forma torrencial increíble, la lluvia caía con tanta intensidad que no podía ver los apartamentos que permanecían quietos en la otra calle.

Se levantó y fue al servicio. Al salir del servicio cogieron cada uno los abrigos y pusieron rumbo a la puerta para irse a casa. Paul se puso su gabardina negra y salió detrás de Jim y Clark.

Comenzaron a salir y contemplaron tres siluetas negras debajo de la lluvia torrencial y un coche esperando tras ellos. Desde dentro del bar los parroquianos oyeron unas ráfagas de disparos.